Presbicia

El cristalino normal es elástico desde el nacimiento. Gracias a la elasticidad del cristalino, el ojo puede adaptarse a diferentes distancias mediante un cambio esférico: será más esférico para la visión cercana y más plano para la visión lejana. Dado que un niño tiene un cristalino muy elástico, logra ver objetos mucho más cercanos que un adulto. Al envejecer, el cristalino pierde elasticidad y, en consecuencia, la distancia para focalizar de cerca es cada vez mayor. Entre los 40 y 60 años, la longitud de nuestros brazos ya no es suficiente para leer sin gafas. Este trastorno se llama presbicia.